Acerca de "Criando Caracoles"


Hace algún tiempo, cuando estaba en boga la maravilla de la crema de baba de caracol, utilizada para quitar estrías, borrar cicatrices, quitar celulitis, etc., me dio la onda de criar caracoles.

Si ya había hecho cosas con hidroponía, lombrices, acuaponía y otras cosas, ¿por qué no entrarle a los caracoles?

Comencé con los caracolitos esos que aparecían en mi patio, en Tampico, Tamaulipas, más o menos de la mitad de la uña de mi dedo meñique, solo por hacer el experimento.

Los caracoles crecieron a todo dar. No solo parecían vivir a gusto en su “caracolera”, sino que se reprodujeron.

Después de ese pequeño éxito me quedé con que compraría caracoles Helix Aspersa y los criaría para tener la especie correcta, pero como muchas cosas, se quedó esperando en la cola de varios otros proyectos por completar.

Por fortuna mi hija fue a Valle de Bravo de vacaciones y me trajo unos cuantos caracoles que consiguió. Sobrevivieron 2.

Nadie les hacía mucho caso porque no habían tenido actividad, supongo que por el frío, pero ahora, Febrero 2012, tuvimos nuestras primeras dos camadas.

Con esto, al igual que con las demás cosas que tengo, nace este blog, donde puedo compartir lo que va saliendo y unir las distintas biotecnologías que he aprendido con el correr de los años para ver qué puedo juntar para ahora que se acabe el mundo en Diciembre del 2012.

En fin, si quieres criar caracoles hay muchos recursos científicos, pero yo me enfoco a lograr que estas cosas funcionen a nivel casero. Así que dale una vuelta al blog si quieres saber de “caracolería” o, como le dicen oficialmente, “Helicicultura”.